Los frigoríficos y congeladores solares,
son equipos diseñados para operar con
una alimentación cuyo rango de tensión
nominal oscila entre los 12 – 24 V con el fin de
maximizar su eficiencia energética. Es decir
que racionalizan al máximo el empleo de
la energía, por lo que pueden alimentarse
gracias a paneles fotovoltaicos y un banco
de baterías reducido.
Los alimentos, el material sanitario y otros
suministros requieren a menudo de unas
condiciones de refrigeración que aseguren
y prolonguen su vida útil en buen estado.
Sin embargo, en muchas regiones la red
convencional no es accesible o no existe un
suministro regular.